Aeropuerto, de San Pedro, Honduras, inundado por Huracán Eta

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El aeropuerto Ramón Villeda Morales, ubicado cerca de la ciudad de San Pedro Sula, resultó inundado a causa de las fuertes lluvias dejadas por la tormenta tropical Eta a su paso por el norte de Honduras..

Además, cientos de vecinos de San Pedro Sula tuvieron que abandonar sus viviendas cuando el agua del río Chamelecón llegó hasta sus puertas. Mientras que comunidades quedaron aisladas debido a la destrucción de carreteras.

#Centroamérica espera bajo el agua la llegada de una nueva tormenta tropical.

@Aeropuerto de San Pedro en la capital de @Honduras al paso de Huracán categoría V entre ayer 16 y hoy 18 de noviembre 2020.

#DestructivoHuracán #Iota devasta e inunda Nicaragua

#El mayor peligro de Iota para Nicaragua, Honduras, Guatemala y El Salvador son sus copiosas lluvias.

#Inundación por el ciclón Iota tocó tierra en el litoral caribeño nicaragüense convertido en un huracán de categoría 4 con vientos sostenidos de 250 kilómetros por hora.

#Lota resultó ser más potente y destructivo que #Eta en Nicaragua, su predecesor que hace menos de 15 días golpeó esta misma zona rica en recursos naturales, pero muy pobre y marginada a la vez, en especial sus pueblos indígenas Miskitos y Mayagnas.

La primera ciudad en ser embestida por el fenómeno natural fue Bilwi, en Puerto Cabezas, una localidad que no había empezado a recuperarse del embate de Eta, cuando Iota zarandeó con más intensidad viviendas y comunidades enteras. Sin embargo, en esta ocasión no se degradó con la misma rapidez en tierra firme. Las ráfagas de Iota prosiguieron hasta llegar el llamado Triángulo Minero de Nicaragua, conformado por los municipios de Bonanza, Rosita y Siuna, este último donde vive Villavicencio.

El poder del huracán con vientos sostenidos que arrancó de raíz enormes árboles maderables. Aunque Iota tocó tierra sobre las 10.30 de la noche, fue a partir de las 3.30 de la madrugada del martes cuando sus vientos estremecieron las comunidades y el casco urbano de Siuna, Rosita y Bonanza.

Poca asistencia gubernamental

El vendaval abofeteaba con tal magnitud, que arrancaba los techos y ventanas de las casas o derribaba árboles que aplastaron pequeñas viviendas.

La comunidad La Bomba fue una de las más afectadas en Siuna, una ciudad cruzada por la fiebre del oro y la producción agropecuaria. En la mañana de este martes, los estragos del ciclón eran la representación literal de su nombre: una especie de estallido huracanado con árboles partidos en las laderas de las montañas, champas (chabolas) desechas, deslaves, láminas de zinc esparcidas en el piso, cerdos comiéndose los plantíos arrastrados por la corriente, y ríos que se extendían más allá de sus caudales.

 

Una estructura metálica fue tumbada por los vientos del huracán Iotra en la ciudad de Siuna.

En La Bomba, más de 46 familias fueron evacuadas, según Germán Leiva García, secretario político del Frente Sandinista en el lugar. Él es una de las figuras usadas por el Gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo en los territorios como caporal para ejercer el control político del partido.

En el albergue que funciona en La Bomba, algunos comunitarios comenzaron a buscar sus casas ante la falta de pertrechos, sin importar que la alerta roja provocada por Iota siga activa debido a las inundaciones. La ausencia gubernamental para dirigir las evacuaciones no solo sucedió en La Bomba, sino en comunidades como la de Marisol Villavicencio o la del Bodegón en Siuna, donde los pobladores con recursos propios de movilización lideran los traslados a los albergues.

Algo parecido ocurre en otros departamentos, según reportes de noticias locales. No obstante, el Gobierno asegura, a través de su propaganda, que han acompañado a los damnificados.

En el albergue que funciona en La Bomba, algunos comunitarios comenzaron a buscar sus casas ante la falta de pertrechos, sin importar que la alerta roja provocada por Iota sigue activa debido a las inundaciones. La ausencia del Gobierno en la organización de las evacuaciones también se repitió en comunidades como la de Marisol Villavicencio o la del Bodegón en Siuna, donde los pobladores con recursos lideran los traslados a los albergues. Algo parecido ocurre en otros departamentos, según las noticias locales. No obstante, el Gobierno asegura que han acompañado a los damnificados.

Sigue por el norte con dirección a Honduras Iota se degradó a tormenta tropical este martes y avanza por el norte de Nicaragua y se prevé que impacte en Honduras, en la zona del departamento de Cortés, también devastada por Eta.

El mayor peligro de Iota para Nicaragua, Honduras, Guatemala y El Salvador son sus copiosas lluvias ante un suelo que no absorbe más agua después del paso de dos ciclones en tan solo dos semanas.

Al menos en Siuna, en el Caribe Norte de Nicaragua, todos los ríos principales, riachuelos, ciénagas y quebradas están rebalsadas. En la tarde de este martes, con Iota adentrándose en el istmo, las principales ciudades del Pacífico nicaragüense (Rivas, Carazo y la capital Managua), así como otras localidades norteñas sufrían graves inundaciones. Aunque no hay aún un balance de daños, la acumulación de agua, que ya acabó incluso con un puente en el sector del municipio de Wiwilí y Siuna, la situación apunta a volverse en catástrofe si los aguaceros persisten.

INFORMACIÓN DEL PAÍS .

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